Septiembre es el mes de la primavera en el hemisferio sur y nos acercamos al momento en que la luz y la oscuridad se encontrarán en igual posición para luego la luz ganar a la oscuridad.
Los wiccanos hoy en día celebramos el Sabbats de primavera, haciendo una división igual del año. Muchas brujas llaman a este festival Ostara, o Eostre, en honor a la
diosa anglosajona cuyo nombre fue recogido por los cristianos y luego aplicado a la Pascua (Easter en inglés).
Una característica importante de este Sabbat es que marca simbólicamente el momento de plantar las semillas. Esto significa que es el momento de “echar a la tierra” de nuestras vidas nuestros proyectos y deseos para el año, teniendo en cuenta las meditaciones y preparaciones realizadas en los Sabbats anteriores.
En la tradición sajona de brujería, el sabbat de primavera es también el único rito en reconocimiento de la unión sexual entre hombre y mujer que crea toda la vida humana donde el sacerdote empuña la vara priápica en representación del miembro masculino. Brian Branston en su libro The Lost Gods of England nos dice: “En Uppsala, dice Adam de Bremen, hay un ídolo de Frey (Ing) con un pene erecto exagerado; allí se le llama Fricco o 'Amante', un nombre que parece derivar de una raíz indoeuropea prij , 'amor', la misma con la que están relacionados Frig y el (dios) romano Príapo.”
Por otro lado, la sacerdotisa es la encargada de tomar entre sus pechos el cuenco con tierra fértil, simbolizando la fertilidad de la Tierra Madre, Buckland en El Libro de la Brujeria Sajona dice: Freya nació de Nerthus (la Madre Tierra), pero después tomó sobre sí muchos de los atributos de su madre. Brian Branston agrega: “De hecho, Frigg y su doble Freya son la fértil y hermosa Madre Tierra; y las restantes diosas del panteón poco más que aspectos especializados de los atributos de la Madre Tierra”.
En esa tierra es plantada la semilla de la esperanza de la vida, nuestros proyectos, por venir.
A través del simbolismo de la plantación, recordamos que sólo podemos alcanzar nuestros objetivos si les dedicamos tiempo, esfuerzo y energía, nutriéndolos como un brote que necesita calor, agua y tierra fértil.
Imagen de Eostre del periodico The Valentine Democrat 1903
Imagen de Ing tomada de pinterest
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